LAS FÁBULAS DE ESOPO.
Esopo fue un fabulista de la Antigua Grecia. En la época clásica su figura gozaba de gran popularidad. Vivió entorno a los siglos VII y VI a. C.
La primera referencia que se conoce sobre Esopo es un kilix de figuras rojas, entorno al año 470 a. C donde aparece representado hablando con una zorra.
Las fábulas de Esopo tienen su origen en la época arcaica. Fueron recopiladas en el siglo IV a. C por Demetrio de Falerio, aunque la recopilación se perdió. La principal colección de fábulas atribuidas a Esopo de donde se basan muchas ediciones modernas es la llamada Augustana, anónima, que algunos autores la fechan en el siglo I o II y otros en el siglo V, y se complementa con otras dos colecciones anónimas, la Vindobonense, del siglo VI y la Accursiana, del siglo IX.
La estructura de la fábula esopica se le atribuye a Nojgaard quien distingue en la narración tres elementos o momentos imprescindibles:
- La situación de partida, donde se plantea un determinado conflicto entre dos figuras (normalmente animales).
- La actuación de los personajes.
- La evaluación del comportamiento elegido.
Algunas de las principales fábulas de Esopo son: Androcles y el león, Bareas y Helios, El abeto y el espino, La rana que quiso ser buey, Las gallinas de los huevos de oro, La zorra y el mono rey, Las gallinas gordas y las flacas.